Hace ya varios años, se hizo un estudio piloto para identificar si consumiendo amaranto de forma constante se podía solucionar el problema de la desnutrición en niños y niñas.Este estudio lo realizó Amaranto de Mesoamérica para el Mundo SC de RL.
El resultado fue, que consumir una alegría de tan solo 15 gramos todos los días, en un periodo de dos meses, niños y niñas con desnutrición leve salen de ese cuadro. Para el caso de desnutrición aguda en tres meses pueden salir de este cuadro.
Lo interesante es que una alegría es muy bien aceptada por los niños y niñas. Esto confirma que las localidades rurales marginadas deben asumir al amaranto como una alternativa para combatir o enfrentar la desnutrición.