La colmena número 63, llamada “El Pirul”. de San Pedro Guegorexe, el día de ayer elaboró un platillo integrando hojas de amaranto. Estas mujeres prepararon calabacitas con hojas de amaranto y granos de elote. Dicha actividad, se hacen en el marco de la campaña de “Comer Sano y Nutritivo”, que las Promotoras de Desarrollo y Servicios Financieros (PDSF), están llevando implementando en las colmenas que atienden.
Samaria Florean, nos compartió que el día de ayer 30 de mayo del 2018, con las colmenas 118, “Arrazola” y 125 “Voluntad”, ambas pertenecientes al municipio de Santa Cruz Xoxocotlán, elaboró, calabacitas a la mexicana con hojas de amaranto y granos de elote y agua de piña con hojas de amaranto. esto es parte de la reflexión que las colmenas hacen respecto a una alimentación más sana en donde se integra el amaranto.
Dadas las condiciones de urbanidad que se vive en Xoxocotlán, son muy pocas las mujeres que pueden producir sus plantas de amaranto, sin embargo se las ingenian para abrir pequeños espacios para hacerlo, sea en diminutos huertos o en macetas, lo importante es conocer como crece la planta y tener el placer de producir alguna verdura necesaria en nuestra alimentación.
La Colmena Número 59. “Las Reinas” del Fraccionamiento de Reyes Mantecón, en su trabajo de concientización sobre una alimentación sana integrando frutas, verduras, hojas y cereal de amaranto, elaboró ayer 30 de mayo del 2018 un rico coctel de frutas con cereal de amaranto.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir 400 gramos de frutas y verduras al día, sin embargo, en el caso de los mexicanos y pese a la disponibilidad de dichos alimentos en el territorio, la cifra sólo llega a 235 gramos diarios; poquito más de la mitad de lo recomendado.
Se sugiere comer cinco raciones de estos alimentos ricos en vitaminas, minerales, fibra y proteínas, repartidos en tres de verduras y dos porciones de fruta, con lo que se lograría un consumo anual de 88 y 59 kilogramos, respectivamente.
En el 2003, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), en conjunto con la OMS, lanzaron una iniciativa a nivel mundial para impulsar la producción y consumo de estos alimentos naturales, los cuales, calcularon, podrían ayudar a salvar 1.7 millones de vidas, pues sus nutrimentos son de apoyo para prevenir enfermedades crónicas como las cardiopatías, cáncer, diabetes o la obesidad.
Basados en estos datos, las Promotoras de Desarrollo y Servicios Financieros (PDSF), del Programa de Microcrédito Bancomunidad – Fincomunidad se encuentran en campaña permanente porque en las colmenas, las integrantes hagan conciencia de la necesidad de comer “sano y nutritivo”.
Adjunto algunas Fotografías de como terminan las reflexiones de estos temas en la colmena mencionada que acompaña Esperanza Velasco Rodriguez, quien también nos comparte estas fotográfias.
Pues NO… El organismo de las mujeres tienen diferentes funciones en comparación con el organismo de los hombres; y por lo tanto los requerimientos nutricionales son diferentes para ambos, basta citar algunos ejemplos; las mujeres cada mes presentan su sangrado (menstruación) y durante ese período su organismo pierde mucho Hierro y calcio (por eso muchas veces terminan perdiendo sus dientes antes de ser ancianas, esto se debe a que su organismo para compensar la perdida de calcio ya sea durante el embarazo o la menstruación lo obtiene de los dientes y por eso se descalcifican, se pican más fácilmente o simplemente se caen. Uno de los componentes esenciales de la sangre que pierden las mujeres es el Hierro, esto provoca que las mujeres sean más propensas a tener anemia.
El amaranto contiene estas sustancias que nos hacen diferentes, por lo que se dice que el amaranto es ideal para mujeres, niños y adultos mayores porque a estos últimos les aporta el calcio que van perdiendo con la edad.
La hoja del amaranto es excelente para su consumo en fresco y por su sabor tan suave puede integrarse a una gran variedad de guisos sin modificar su sabor ni apariencia y sí sus nutrientes.
Las hojas del amaranto se pueden aprovechar elaborando aguas frescas, ensaladas, sopas, jugos, guisos, tortillas, tamales, etc. Además por su alto contenido de Hierro, es ideal para evitar la anemia especialmente en mujeres embarazadas y niños.
También contienen más calcio, fósforo, y vitamina C que las espinacas, y además son ricas en folato (ácido fólico) y otros nutrientes presentes en las semillas.
Las altas cantidades de micro- y macronutrientes en las semillas y en las hojas resultan ser muy importantes para enfrentar varias enfermedades fácilmente prevenibles en las poblaciones rurales oaxaqueñas.
Después de la primera semana de iniciar el proceso de retroalimentación y capacitación en temas del valor nutricional de la hoja y grano del amaranto, se ha empezado a dar un fuerte interés por consumir, pero también por cultivar amaranto; esto principalmente en huertos familiares. En la ventanilla de Zimatlán es muy notorio el interés de sembrar; pues han llegado muchas mujeres a solicitar sus sobres de semilla para siembra.
Nos da mucha alegría ver como el amaranto se empieza a posicionar y consolidar como un alimento cada vez más común en la alimentación de las familias de valles centrales de Oaxaca y es menester reconocer el esfuerzo y empeño que hacen las Promotoras de Desarrollo y Servicios Financieros (PDSF) del Programa “Bancomunidad – Fincomunidad” del Centro de Desarrollo Comunitario “Centéotl” AC, quienes se capacitan para compartir la información nutricional, como elaborar alimentos a base de hoja y grano y también como sembrar un huerto de amaranto, a quienes extendemos un sincero reconocimiento.
Desde la tercera semana de mayo y hasta la segunda de junio, todas las colmenas formadas por el Programa “Bancomunidad – Fincomunidad”, tendrán sesiones de retroalimentación y capacitación en temas del valor nutricional de la hoja y grano del amaranto.
Con mucho ahínco y compromiso, las Promotoras de Desarrollo y Servicios Financieros (PDSF). Retoman temas de nutrición y consumo del amaranto con estos grupos de mujeres dispersos por lo menos en 80 localidades de valles centrales de Oaxaca.
Este proceso de formación terminará con talleres de cocina; integrando hoja, cereal y harina de amaranto en las colmenas.
