Othón Cuevas Cordova, diputado local y fundador del Centro de Desarrollo Comunitario “Centéotl” AC en estos días en que Oaxaca se despide de su hijo pródigo, el maestro “Francisco Toledo” nos contó la siguiente historia que nos gustaría compartirles:

“Sería el año de 1990 o 1991 cuando conocí a Edmundo Aquino, uno de los grandes pintores oaxaqueños, oriundo de Zimatlán de Alvarez, quien por muchos años nos cobijo en su casa cuando íbamos a gestionar recursos a la Ciudad de México, ante la Embajada de Holanda, la Embajada de Canadá, en la búsqueda constante de apoyos para incubar Centéotl.
El primer proyecto que nació, fue el de la “biblioteca infantil el rehilete” y esta tuvo un origen muy peculiar. Por ese entonces teníamos una camioneta Ford que nos donó Luis sereno uno de los primeros benefactores de Centéotl, Edmundo Aquino me llevó en esta camioneta a Tlalpan, a la casa de un pintor amigo suyo; se llamaba Francisco Toledo y tenía una editorial llamada “Editorial Toledo”. Francisco Toledo, me regaló cajas de libros y recuerdo que dentro de todos esos libros venía uno que tenía uno de los titulos más singulares que recuerdo, se llamaba “la historia de la mierda”. Con esos libros llenamos los estantes de la biblioteca “el rehilete”.
Eran los años en que eran amigos Edundo Aquino y Francisco Toledo. Cómo llevaba yo carro, pues me traje las cajas de libros y un rollo de algo, me dijeron -cómo llevas carro llévatelos por favor- Llegué a Zimatlán y descargue los libros que eran valiosísimos para nosotros porque no teníamos nada más que estantes vacíos, colocamos los libros y el rollo se quedó arrumbado. Como no había celular ni bíper ni nada para comunicarse, llegaron a buscarme, un dìa, al otro día y se la pasaron buscándome varios días y hasta la semana siguiente me encontraron, desesperados ya por ese rollo. Resulta que el maestro Toledo además de darnos los libros para iniciar la biblioteca, aprovechó el viaje para mandar pinturas suyas. Nunca supe lo que tenía en mis manos, se las entregué. Fueron obras que después estuvieron expuestas en el Museo de Arte Contemporaneo de Oaxaca.
Toledo y Aquino enemistados en algún momento en la historia de sus existencias y muertos ambos en el mismo año, fueron parte muy importante en la historia de Centéotl AC”

Esto es un sencillo homenaje que los integrantes del Centro de Desarrollo Comunitario “Centéotl” AC queremos hacer al gran maestro que se daba a sí mismo a los demás y nosotros no fuimos la excepción.